La Comisión Europea adoptó nuevas normas de higiene para materiales y productos en contacto con el agua potable que se aplicarán a partir del 31 de diciembre de 2026.
Esto mejorará la calidad del agua y hará que sea más segura para beber. Asimismo, la carga administrativa para las empresas y autoridades se verá reducida ya que los productos que cumplan con estas normas recibirán una declaración de conformidad de la UE y un marcado específico, permitiéndoles venderse en toda la UE sin restricciones